Además de los bidegorris a lo largo de núcleos urbanos como Santander o Torrelavega, este territorio es un lugar idóneo para la práctica deportiva del ciclismo de carretera y el cicloturismo entre puertos y valles de diferentes altitudes. Cuenta con varios entornos singulares que ofrecen la posibilidad de utilizar BTT o bicicleta de montaña, como los macizos montañosos de Picos de Europa.